Mayo

Pasé el mes de mayo estresadísima, por trabajo, por mis picores y sudores y por mis exámenes finales.

Todo el mes de mayo haciendo dieta para que la histamina no aumentara, tomando más de 6 pastillas homehopáticas al día, histérica, pensando que era yo misma que me provocaba los picores, que se me estaba yendo todo de las manos, y en realidad aunque no lo supiera era así. Mi vida estaba a punto de pasarse en seco.

De enero a abril con el Dr. nº3

Como podéis suponer no tuve sarna, ni dermatitis, ni alergia a la tinta de mis tatuajes, ni alergia al pegamento de los brackets que llevaba en los dientes, ni vasculitis.

Lo que si tuve y tendré es una cicatriz de por vida en mi gemelo derecho de una biopsia, que resultó que decía que tenía vasculitis… De todos y cada uno de los medicamentos que me hizo tomar el Dr.3, como fueron Atarax, Zolistan, Ebastel, Cetiricina, Bilaxten, Cortisona, y cremitas como futicrem o elocom nada funcionó, de las 12 visitas a este médico en cuestión no me sirvió ninguna, más que para perder el tiempo, el dinero y por supuesto y lo más importante mi salud. Me tiré 5 meses sin dormir, desesperada, arrancándome la piel, engordando por la cortisona, con ansiedad y todo por hacer caso a un médico que no tenía ni idea de lo que me pasaba pero que tampoco quiso derivarme a otro especialista.

A medidados de abril me cansé de que se pensaran que soy tonta y decidí ir a la medicina natural,la homehópata  consiguió que durmiera dos semanas, luego empezó mi calvario.

De dermatólogo en dermatólogo y tiro porque me toca

Mi pareja y yo decidimos pedir una tercera opinión antes de somenternos al tratamiento contra la dichosa sarna. Me recomendaron un dermatólogo, el número 3, busqué información sobre él en doctoralia.com, decían que era un Dios de la dermatología, que era el mejor de la cuidad, que era el único capaz de diagnosticar según que cosas…(Lo pienso ahora  y me entra la risa floja)

El caso es que yo y mi sarna nos presentamos ahí con la esperanza de otro diagnostico, y así fue, el doctor 3 me atendió muy amablemente me exploró e inspeccionó la piel y llegó a la conclusión de que lo que tenía era una dermatitis atópica, Exactamente lo que quería oir, me fui de ahí más contenta que un niño con zapatos nuevos, esperando pasar unas Navidades estupendas sin picor y con mis cremitas nuevas!